Hay poco mas que decir sobre la terrible situación que vive Venezuela. Todo parece estar estallando a la vez, sin que aparentemente exista modo alguno de frenar los colapsos. El régimen, empero, simula y disimula. El estado de negación de la realidad luce como una estrategia estúpida. La farsa ya es indisimulable. Hasta los más frenéticos soportes comienzan a gaguear frente a las cámaras.
La reunión en República Dominicana perfila como un encuentro muy difícil. Porque la oposición va con data dura, de esa incontestable que pone la piel de gallina. El régimen llegará con un clásico discurso retórico, cargado de frases hechas y florituras que sólo pondrán de relieve toda la basura que pretenden esconder. Y todo ocurrirá frente a cancilleres de países que no tienen ya por qué congraciarse con el “stablishment” venezolano.
Por supuesto, la oposición no logrará todo lo que lleva en la lista de peticiones. Pero va a tener un ceder en algo. Supongo que no será en la liberación de presos políticos. Porque el gobierno tiene una relación psicótica con eso de tener tras las rejas a un bojote de gente. Le causa placer. Se siente macho, poderoso. Y luego de la fuga de Ledezma, peor. Porque todo el parado de seguridad quedó en ridículo frente al mundo entero.
Creo que la delegación de oposición es de lujo. Gente capaz y muy inteligente. Espero que no se pongan recalcitrantes, que sepan tener lo que en fútbol se llama “juego de cintura”. Jorge Roig dice que van a Quisqueya a luchar por Venezuela. Bien. Así es. Se trata de Venezuela y los venezolanos. De los caen víctimas de las carencias y la inseguridad. De las santamarías que se cierran y las industrias apagadas. De la protuberante corrupción que llega a los más altos niveles. Del vergonzoso desempeño de un organismo electoral que ya no se mide en generar violaciones de todo género haciendo que cualquier elección en el país sea una burla a los ciudadanos. Del despilfarro incontenible de un régimen que no quiere entender que su gestión pública es un canto a la vagabundería. No creamos por Dios que el de Maduro es tan solo un gobierno incapaz, incompetente e ineficaz. No. Es, además de todo eso, el negocio más redondo para una pandilla de enchufados que se han convertido en magnates a costillas de la destrucción del país.
A Jorge Rodríguez no se le vence en un debate comprando sus babiecadas y majaderías. A cada argumento fabricado por su mente retorcida que ponga sobre la mesa hay que responderle con verdades duras y puras. Números, estadísticas, material gráfico. No hay que caer en su juego psiquiátrico. No hay que acostarse en el diván que él lleva como equipaje.
Que no se confundan los que van en esa delegación. Foco. Persistencia. Radiografías. Y razones. El resto es adorno inútil.
soledadmorillobelloso@gmail.com
Hola Soledad, a manera de gentil aclaratoria, hablar de Borinquen es hablar de Puerto Rico, por lo que si Jorge Roig fue a Borinquen a defender a Vzla, se equivoco de lugar de reunion. Saludos