Publicado en: Tal Cual
Por: Laureano Márquez
En medio de esta tragedia que, tanto para Ucrania como para la humanidad toda, ha significado la invasión de este país por las tropas de Vladimir Putin, una personalidad ha cobrado relevancia heroica por la valentía y el coraje con que ha conducido la resistencia de su país a la agresión: se trata de Volodímir Zelenski.
Cuando se revisa la biografía del presidente ucraniano, lo primero que encontramos es que se trata de un niño de apenas 44 años. Casado y padre de dos hijos, Zelenski es abogado graduado en la universidad de Kiev. Sin embargo, no es en el derecho donde el sexto presidente ucraniano ha destacado antes de dedicarse a la política. Su actividad profesional la ha desarrollado, fundamentalmente, en el campo del humorismo. Para que se diga luego que el humor no es cosa seria.
A riesgo que se me acuse de querer halar la brasa a mi sardina afirmando que el coraje de Zelenski se debe a su carrera de humorista, es de justicia reconocer que esta condición debe haberle ayudado mucho.
Creo que el humor es expresión de una sensibilidad muy particular para la comprensión de los dolores, angustias y necesidades de la gente, entre otras razones, porque es inherente al humor la facultad de poseer una aguda capacidad de observación de la realidad.
Entre las múltiples actividades en las que participó Zelenski en el mundo del espectáculo, está la de haber sido protagonista de una serie de televisión en Ucrania, una sátira cuyo título era: «Un servidor del pueblo», estrenada en noviembre del año 2015. En ella Zelenski representaba a un profesor de historia de bachillerato, cuyos alumnos convirtieron en un personaje viral difundiendo un video de sus clases en el que hacía severas críticas a la corrupción en el gobierno ucraniano. El impacto mediático que alcanza el personaje le lleva a convertirse en presidente del país (al protagonista de la serie –en la serie, quiero decir–). La sátira fue muy exitosa en Ucrania y en Bielorrusia. En Rusia se alcanzó a trasmitir el primer episodio, pero un chiste alusivo a Putin terminó sacándola del aire.
Como en un juego de espejos, muchas veces la realidad termina imitando a la ficción. Zelenski registró en el año 2018 un partido político con el nombre de la serie, y como su personaje, Vasyl Petrovych Holoborodko, terminó convertido en presidente de su patria. Todos estos datos de la biografía de Zelenski nos eran tan desconocidos como él, ahora convertido en una figura de relieve universal, por el rol que ha desempeñado al frente de su ejército y su pueblo en la defensa de la independencia de su país.
Curiosa historia la de Volodímir Zelenski y curiosa la historia universal: siendo Ucrania un país tan cercano a Rusia, al punto de que parte de su población habla el idioma ruso, defienden con coraje su derecho a la autodeterminación. Otros países, sin embargo, muy distantes de Rusia, geográfica, histórica e idiomáticamente, le entregan su propia independencia de manera voluntaria. Cosas del destino de las naciones.
Venezuela necesitaría una serie como el «Servidor del pueblo», pero no creo que, dadas las circunstancias, Putin permita siquiera el primer capítulo.