La tragedia la visitó desde muy niña. Tenía poco más de tres años aquel día del aparatoso accidente automovilístico. Ella y sus dos hermanos mayores, sentados atrás, sobrevivieron. No así los adultos, sentados adelante, entre los que estaba su madre. La colisión contra el camión fue espantosa.
El viudo se hizo añicos. Solo lo consolaba el amor de sus hijos. No fue sino hasta que conoció a una azafata, que en buena hora lo rescató de la densa tristeza. Se casó con ella y la mujer se convirtió en madre de aquellos tres.
La niña había nacido el 23 de enero de 1964 en Santa Mónica, California.
Hermosa desde pequeñita. Al fin y al cabo, no podía ser de otra forma siendo hija de Miklós Hargitay, actor húngaro que fue Mister Universo en 1955 y de Vera Jayne Palmer, la imborrable Jane Mansfield.
Pero Mariska no es tan solo una cara bonita en un cuerpo de infarto. Es una mujer poderosa.
Desde muy joven supo que quería ser actriz. Y estudió para ello en UCLA. Entendió que era una carrera que para hacerla bien hay que empezar desde el principio. Entendió también que se actúa en pantalla grande y chica.
“Perder a mi madre a tan temprana edad dejó una marca en mi alma”, declaró en una entrevista.
Su debut en el cine fue en 1985 con la película Ghoulies de Luca Bercovici; a seguir Welcome to 18, 1986, de Terry Carr, Jocks, en 1987 de Steve Carver, Mr. Universe, en1988, de Gyorgy Szomjas, Vaya con Dios, 1990, de John Lee Hancock, Arma Perfecta, en 1991, de Mark DiSalle , Strawberry Road, en 1991, de Koreyoshi Kurahara, Ladrón de bancos, 1993, de Nick Mead, Leaving Las Vegas ,1995, de Mike Figgis, Mandíbulas, 1999, de Steve Miner, Secrets: Vestida para matar, 2001, de Michael Rymer, La pura verdad, 2004, de Paul Shapiro.
Pero su gran triunfo vino con su trabajo en televisión, en las series El Pecado, Falcon Crest, Prince Street, Vigilantes de la playa, y, al fin, en Law&Order: Special Victims Unit.
Por su papel como la atractiva e inteligente detective de la policía de Nueva York Olivia Benson, Mariska ganó un Globo de Oro en 2005; fue nominada ocho veces a los premios Emmy y lo ganó en 2006. También recibió dos Gracie Allen Awards y un Prism Award.
Está casada con el actor Peter Hermann, actor y escritor a quien conoció en Law & Order: SVU. Herman ha interpretado al fiscal Trevor Langan. Tienen tres hijos (dos de ellos adoptados).
Mariska entendió que con su papel como Olivia Benson ella podía ir mucho más allá del entretenimiento. Podía generar conciencia y educar a los jóvenes.
Las cifras son tan espeluznantes que hasta me cuesta escribirlas: 3 de cada 10 mujeres en el mundo son o han sido abusadas sexual o físicamente; y en algunos países esa cifra aumenta a cinco de cada diez. Y los abusadores suelen ser familiares, jefes, o conocidos.
Esto tiene que parar. Mariska Hargitay lo sabe y por eso, a sus 57 años, sigue encarnando a la detective Olivia Benson.
Lo que ella ha hecho por la lucha contra los abusos sexuales o de poder es mucho más de lo que han hecho otros que tanto cacarean.
Cada capítulo de Law & Order SVU es en sí mismo una cátedra. Por su papel en la serie se involucró personalmente en el asunto y desde 2005 preside la Fundación Joyful Heart, dedicada a la ayuda a víctimas de abusos. Cómo Mariska es políglota – domina inglés, ruso, español, francés, italiano y húngaro- logra llegar a muchas comunidades hablándole en su propio idioma.
Si estuviera en mí, diariamente en los salones de clase les pasaría a los jóvenes un capítulo de Law&Order:SVU. Estoy segura que Mariska -Olivia Benson- les abriría la conciencia y les enseñaría que cuando se dice no es no.