Por: Rómulo Aponte
Venezuela sufre hoy la condición postraumática provocada por las imágenes y el recuerdo del trauma electoral que alteró nuestro ya escaso y frágil equilibrio emocional. Hoy la conciencia y la mente de los venezolanos están invadidas por el mayor fraude electoral que reitera con insidiosa insistencia el atropello a la dignidad del pueblo , perpetrado por los asaltantes del poder.
El análisis del perfil psicológico del “alto gobierno” se corresponde con los Trastornos de Personalidad Psicopáticos. Carecen de sentimientos profundos y sus vínculos amorosos son inestables. Son malos amantes en sus vidas privadas y públicas. Manipulan la miseria con su falso encanto, pero son agresivos, crueles y cínicos. Carecen de empatía.No sienten culpa ni remordimiento. La autocrítica les es ajena. Son mentirosos , falsos, estafadores y transgresores de normas y leyes.Violan la dignidad y los derechos de otros. Son perversos.Ellos fueron niños maltratados y abusados y así aprendieron a ver a los demás como malas personas que merecen ser castigados, utilizados y explotados para así satisfacer sus egocéntricas pretensiones. Su único interés es el ejercicio arbitrario del poder para ejecutar ahora, la revancha supuestamente justiciera, de los maltratos tempranos que sufrieron ayer y hacerse pletóricos de sus mezquinos y egoístas intereses devengados de su satrapía.
Necesitamos con criterios de emergencia psiquiátrica expulsar el trauma de nuestras mentes y a los psicópatas del poder.