Por: Alicia Freilich
Es un dilema complejo pero claro. El gorila tochavista, bestial, ignorante y codicioso ha parido al liderazgo opositor
que la disidencia no pudo articular debido a su justificado temor a represiones criminales como las de Puente Llaguno (abril 20002)y Plaza Carabobo (febrero 2014). Asesinar protestas es la única defensa que tiene el fasciocastrismo de Miraflores con Fuerte Tiuna frente al 80% de la población que lo rechaza y quiere cambio de sistema.
El civilismo està disperso en destierro y exilio forzados y voluntarios, internos y foráneos, una oposición formal de partidos políticos tradicionales sin masas militantes promoviendo continuas elecciones fraudulentas que legitiman al régimen militarista y una sociedad por ahora apartidista disidente en busca de la dirigencia nueva, sin rabo de paja ni techo de vidrio capaz de accionar junto con las necesarias elecciones la opción constitucional 350 que autoriza su derecho a la desobediencia civil cuando el gobierno empoderado viola sistemáticamente los principios consagrados por esa misma Carta Magna, en su origen democrática, republicana y liberal.
La sentencia condenatoria que pretende aislar por catorce años màs a Leopoldo Lòpez es una trampa chavera de las usuales pero en este caso grave. No pueden eliminarlo físicamente de un tajo como lo practicaron sus modelos China maoísta, Alemania nazi, Uniòn Soviètica, Corea Norte, Cuba castrista en su inicio de fusilamientos en paredòn porque la era ciber los desnudarìa de inmediato como criminales de oficio. Buscan desmoralizar en directo a la vìctima encarcelada y a sus seguidores mediante el suicidio espiritual inducido a fuego lento.
Pero el siglo XX entregò ejemplos de triunfante resistencia pasiva civilista con Gandhi, Mandela, Martin Luther King, Lech Walesa. Latinoamèrica en el siglo anterior con Simòn Bolìvar, Francisco de Miranda en sus etapas políticas postbèlicas.Y en Cuba la figura modelo de Josè Martì. Luego, en su perìodo republicano moderno destaca la figura fundacional, intelectual y pràctica del estadista Ròmulo Betancourt. Representan la reacción defensiva de una vasta mayoría silenciosa aplastada, humillada, reprimida y abusada por tradiciones colonialistas y caudillescas hoy de signo totalitario.
La inhabilitación forjada, ilegal ,continua de Leopoldo Lòpez y su inhumana prisión con pena injusta propicia el surgir de un liderazgo firme, resistente, hasta ahora insobornable, alejado del antiguo partidismo que cumplió su función histórica al construir la democracia representativa pero sucumbió por sus propios errores abriendo paso a la tiranìa chavista.
La cubanìa castrense castrista insistirà en negociar con cualquier Satanàs imperialista que le convenga la liberación forzada de un Leopoldo Lòpez expulsado, puede que con disfraz oficialista de huìda voluntaria porque la cobardìa armada del chavismo siente pànico, terror, ante quien representa el compacto sentimiento nacional, ya internacionalpor demás indetenible de la voluntad popular mayoritaria.
Por eso a partir de ahora las protestas deberían adquirir estilo gandhiano y walesista.El pueblo universitario, liceísta, exgremial, exsindicalizado, amas de casa, empleados públicos hartos de amenazas ,chavistas honestos y desengañados, conjunto sentado en avenidas largas,armado con carpas,cobijas,termos,agua,bacinillas,pilas,linternas,paraguas,radios,alimentos que todavía encuentre, hasta que el cuerpo aguante. Severà entonces si el joven soldado criollo, todavía de corazón noblemente venezolano, ante los teléfonos móviles que los retratan y ante sus vecinos hambrientos ,envilecidos por la limosna, es capaz de disparar a sus paisanos como ya lo hace el grupo OLP que ajusticia por òrdenes gubernamentales a sus coco secos, hijos de la calle oficialista.
Confieso por primera vez públicamente que en el 2002 le propuse este método de resistencia a un respetado dirigente izquierdista venezolano con enorme capacidad de convocatoria lo animè a que sin que importara nuestra venerable edad sexy genaria y nuestro para entonces 30%disidente, diéramos el ejemplo con nuestra presencia. Lamentò mi falta de memoria sobre los sucesos de la huelga general fracasada, mi pèrdida del sentido común y tanta pendejera intelectual. Hoy reprimido y deprimido seguro que recordarà el episodio .Pero hay tiempo. Ahora es cuando.
Està `por ver si gente como èl, curtida, lùcida pero ingenua, proclive al autoengaño y sus equivalentes, opinan lo mismo.
Esa es la cuestión. Y se llama responsabilidad directriz frente a situaciones lìmite.La historia lo reclama y juzga.