El desafío de la Unidad es vencer a un Gobierno que trabaja en la oscuridad -Pedro Pablo Peñaloza

Por: Pedro Pablo Peñaloza

No es un tema de días hábiles, sino de políticos hábiles. Y, claro, de una ciudadanía movilizada para alcanzar el objetivo. El presidente Maduro reduce a dos los días laborables a la semana y se levanta el gran debate. ¿Afectará esta medida el proceso para el revocatorio? ¿En serio? ¿Alguien se pregunta eso? Luego, los expertos advierten con la mano sosteniendo la barbilla que el artículo X del reglamento Y de la ley Z establece con absoluta precisión que bla, bla, bla… como si esto fuera un país normal. Si por allí queda alguno que todavía no se ha dado cuenta, habría que explicarle que esto no es un tema de normas y lapsos reglamentarios. Aquí se impone eso que llaman “voluntad política”, que en este caso se resume así: la oposición empujando, apoyada por la mayoría de los venezolanos, buscando quebrar la resistencia de un Gobierno que se ha atrincherado con su Consejo Nacional Electoral, su Tribunal Supremo de Justicia y sus militares para no ceder el poder y frustrar las demandas de cambio que ha expresado la soberanía popular. Sencillo.

Durante todos estos años, el CNE ha trabajado muchas horas extras. En especial en los días de votación, que terminan siempre en la madrugada con los resultados del sistema comicial más blindado del mundo. Cinco meses después, aún no se resuelve la elección de los diputados de Amazonas, uno de los estados menos poblados del país. En cambio, el reclamo sobre las presidenciales de 2013 se liquidó en horas. Perdón, minutos. La rectora Tania D’ Amelio, exdiputada del MVR, lanza oficialmente la Gran Misión Morrocoy. Pronto el PSUV designará a Walter Martínez como jefe de la comisión que revisará las firmas. Inevitablemente, una a una. Dicen que a Maduro se le acabó el tiempo, pero en realidad es lo único que tiene. Los apurados son otros. El problema, entonces, no es la reducción de la jornada ni el racionamiento eléctrico. El problema es que el Gobierno sigue trabajando en la oscuridad.

Miraflores cumple con su labor. En este caso, torpedear cualquier salida democrática, pacífica, constitucional y electoral a la crisis política. Eficiencia o fuera. La Unidad Democrática deberá presionar hasta el límite para superar los obstáculos que todas las instituciones del Estado desplegarán en el camino. El desafío pondrá a prueba la capacidad del liderazgo opositor. Porque es una pelea sin reglas, un “todo vale”, que no sabe de artículos constitucionales ni de horarios de 8 a 5. Cuando se trata de conservar el poder, el chavismo trabaja corrido. ¿El revocatorio se celebrará este año y permitirá conquistar el cambio? La respuesta no es técnica ni legal. Es política. En un país que ha cambiado tanto su huso horario, está claro que no basta con adelantar el reloj para llegar más rápido.