Vendepatria, ¿A quién califica?

  Uno de los insultos favoritos del Presidente, cuando quiere referirse a los opositores, es llamarlos “apátridas” o “vendepatria”. Uno no sabe qué es peor, si vender la patria o sencillamente, no tenerla.

  Pero ese es uno los insultos que con más frecuencia le viene a la boca y lo repiten con vehemencia sus seguidores. Entonces, los que por alguna razón no están de acuerdo con el Presidente, pasan a ser  una especie de venezolanos miserables, de segunda, tercera, quizás cuarta categoría.

  ¿Por qué esa acusación de “apátridas”?  ¿Será porque en el fondo está reflejando una especie de  proyección personal, como queriendo  proyectar en el otro algo de lo que usted se siente culpable?

  A ver, Cuba.

  No hablamos de  Cuba como un problema foráneo.  Hay noticias de Cuba, que en este programa no se tocan en la sección de  información internacional, sino de información doméstica porque en la práctica somos una nación. Ya el Presidente ha hecho de Cuba una nueva porción del país, o según  como se vea, Venezuela una nueva porción o provincia cubana.

  Dejemos de lado el tema del Presidente atendiéndose medicamente en Cuba, ya las razones se han comentado ampliamente, lo cierto es que pareciera que vive allá y nos visita.

  Hoy el Diario  El Nuevo País  dice en su gran titular “El Presidente va y viene” – Casi como el yoyo- Chávez aseguró haber recibido la primera radioterapia apenas llegó a  Cuba y regresará al país el Jueves, va a descansar y se vuelve a ir el fin de semana.

  Evidentemente, el Presidente tiene que dar a entender que está en el país, porque eso de ausentarse un largo mes de convalecencia deja muy mala impresión.

  Pero dejemos de lado ya el tema, habíamos dicho de la dependencia médica del Presidente con Cuba, las banderas cubanas que ondean en el palacio de Miraflores o en Fuerte Tiuna y todos esos detalles, vayamos a algo muy puntual:

  La semana pasada hicimos un foro en  el programa de radio sobre el tema que se ha planteado con la reforma de la Educación Especial. En un país donde la educación carece de tantas, tantas cosas, donde adolece de tantas, tantas cosas. Resulta que algo que caminaba bastante bien era la Educación Especial y esa la van a tocar. La van a tocar para ponerla bajo las directrices de técnicos y especialistas cubanos.

  Todas la personas involucradas, padres, representantes, docentes han dicho que es un error lo que va a hacer el Ministerio de Educación. Todos al unísono. Ninguno de los interesados, como es costumbre en este régimen, fue consultado.
Hoy la señora Maryann Hanson, Ministra de Educación, dice en primera página  de El Nacional: “Considero que los docentes de la isla (de la isla de Cuba se entiende) están montados sobre tendencias más actualizadas en el mundo”.

  ¿Y lo venezolanos, Ministra Hanson?

  En una reseña en páginas interiores  de este diario se lee: “vamos a hablar de cooperación, tenemos profesionales excelentes, pero los cubanos tienen una experiencia interesantísima en Educación Especial. Están montados sobre las tendencias más actualizadas en el mundo ¿Por qué no vamos a aprovechar el conocimiento universal y  la experiencia de cualquier país?.

  Vale, le tomamos la pregunta. Olvídese de consultar a expertos norteamericanos porque eso sería ya algo blasfemo para su ideología. Pero ¿Por qué no otros países de América Latina? ¿Por qué sólo Cuba? ¿Cuál es la obsesión que hay con Cuba?

  Pero “apátrida” o “vendepatria” sigue siendo el insulto favorito de la revolución, ¿Ustedes qué piensan? ¿A quién calificaría de “apátrida” o “vendepatria”?