Una de vaqueros, por favor

  Como todo en la vida, hay cosas buenas y cosas malas. Hay, digamos, una buena película de acción, de espionaje, con una interesante trama magnicida. Me viene a la memoria, por ejemplo, El día del Chacal, inspirada en la novela de Frederick Forsyth. Pero también hay películas muy malas de acción, con pésimas tramas sobre intentos magnicidas. Juzgue usted, ahora, este guión que está por filmarse.

  Leo esta nota en El Universal: El presidente de la Asamblea Nacional Diosdado Cabello dijo que el pasado  24 de julio, durante la conmemoración del natalicio de Simón Bolívar, existían planes para atentar contra la vida del presidente Nicolás Maduro y el Gobierno los frustró. Informó que el principal involucrado en el complot es Luis Posada Carriles. Anunció que el Ministro para las Relaciones Interiores, Miguel Rodríguez Torres, dará nuevos nombres de involucrados en el plan que, aseguró, continua en marcha. Cabello indició que estas intenciones vienen de Miami con conexión en Colombia. ¿En Miami quién? Bueno cubanos mayameros que se fueron hace muchos años y tienen contactos con venezolanos. Eduardo Macaya Álvarez, según la declaración de Cabello, estaría al frente de estas operaciones que incluirían a más de cien hombres y un capital cercano a los 2 millones de dólares. “Se habla de la incursión de más de 400 hombres por el Zulia. Tenían planes y cayó por algunas medidas que tomamos. Aparentemente Ricardo Micheletti, estaría involucrado en esto y el siniestro Álvaro Uribe Vélez.

¿No sería bueno presentar las fotos, las personas, los detenidos y todas las demás pruebas relativas al caso? Como guión creo que le falta, señor Cabello, honestamente. Todo esto, según ha insistido el alto dirigente del régimen, como parte de un plan para desestabilizar el país.

  En la misma edición de El Universal, señor Cabello, está sin embargo la verdadera desestabilización del país. El periodista Eugenio Martínez hace ciertas consideraciones sobre la última encuesta del IVAD. Su nota comienza así: Por primera vez en los últimos siete años la mayoría de los venezolanos tiene una percepción negativa sobre la situación del país y por primera vez en una década se duda del liderazgo que ejerce el jefe del Estado. “Gestión y liderazgo -dice- son los principales problemas de Maduro”.

  Leo: Calificación del inicio de gestión de Nicolás Maduro como presidente de Venezuela: Excelente 7,8%, Bueno 18,8%, Regular hacia bueno 19,9%, Regular hacia mala 12,6% Mal 17,2% pésima 20,6%. Si sumamos las consideraciones negativas 50,4% califica mal la gestión de Maduro.

  Pero hay algo que es más importante. Reseña Martínez: 6 de cada 10 ciudadanos perciben negativamente la situación del país. No obstante, cuando se analiza este indicador por autodefinición política, resalta que en el caso de las personas que se autodefinen como chavistas 31% tiene percepción negativa, mientras, apenas 40% considera que el estado del país es regular hacia bueno.

  Tampoco positivo. En otras palabras, hasta el propio chavismo está viendo la cuestión muy mal.

  Situación política en los actuales momentos: Muy estable, 2,1%, Estable 21,9%, Ni estable ni inestable 8,6%, Inestable 56,3%. Calificación de la situación económica del país: Muy buena 1,9%, Buena 7,9% Regular a buena 23,7%, Regular hacia mala 15,7%, Mala 28,9% y Muy mala 20,7%.

  Sumando las consideraciones negativas 65,3% de los encuestados considera que es mala la situación económica del país. Y cuando le preguntan por la gestión de Maduro 50,4% dice que no le aprueba.

  Esta sí es la situación inestable que debería atacar, enfrentar y corregir el Gobierno, ¿o prefieren seguir escribiendo peliculitas?  A lo mejor una de vaqueros les queda mejor que una de espías.