En el diario El Nuevo País leo lo siguiente:
Si las elecciones presidenciales se realizaran hoy, el Presidente Nicolás Maduro perdería contra cualquier candidato avalado por la oposición. Así lo reflejan los resultados de los últimos estudios realizados por la encuestadora Keller & Asociados, revelados ayer en el marco del foro organizado en Caracas por Venamcham titulado “Hacia dónde va Venezuela en su política económica”. Las cifras demuestran que Maduro sigue perdiendo liderazgo y popularidad considerando que paso de 57% a 38% de apoyo popular. Entre las cifras que maneja la encuestadora se encuentra que el 78% de la población asegura haberse visto afectada por la inflación y por primera vez estas penurias del día a día se las atribuye al gobierno.
En el diario El Universal leo estas estimaciones de Asdrúbal Oliveros, Director de Ecoanalítica: Se espera una contracción nada menos que del 2,5% del PIB para todo el año que será acompañada de una elevada inflación del 75%”.
Lo que viene, pues, es cada día peor.
Tenemos un cuadro económico terrible. La peor crisis económica que haya conocido la república. Y en medio de esto, un gobierno y un partido de gobierno que no las tienen todas consigo. Por eso hemos leído lo referente a la encuestadora Keller & Asociados publicado en El Nuevo País.
El gobierno viene de clausurar el Tercer Congreso de su partido, donde quedó perfectamente claro que a las bases las ignoraron por completo y las dejaron de lado. Y esto traerá sus consecuencias.
Todo esto plantea un escenario donde la oposición debería ser, en este momento, la esperanza real de la población venezolana. Donde la oposición debería ser referente real, único y definitivo, como opción para salir del desmadre que ha supuesto para el país el régimen chavista-madurista. Sin embargo, mientras el país se desmorona y el gobierno con él, la oposición, por lo visto, no se desmorona sino que se vuelve añicos.
Ayer hicimos un foro para analizar la circunstancia de la MUD a raíz de la renuncia de Ramón Guillermo Aveledo, y me llamó la atención el tuit de un oyente: “Con la salida de Aveledo se va el adulto y queda esto en manos de niños.” Queda, según esto, una situación infantil en medio de la oposición. ¿Será cierto?
Por lo pronto, vemos una guerra de egos inaceptable, de dirigentes que escasamente han podido ver más allá de sus narices y que suelen girar solo en torno a ellos mismos.
Pocas veces uno habla de estos temas, porque uno -es sabido- milita en la causa de esa acera, y no es sano prestarse a hacerle flacos favores al adversario. Pero creo que ya, después de tanto, uno tiene derecho a reclamar: señores dirigentes de la oposición, basta, ensériense y respeten al país.
Muy cierto, si la dirigencia de la Oposición no se enseria y se apreta el cinturón en el sitio….. Creo que nos vamos en el caos Chávez- medir ista. O sea se acabó el País!!!
sinceramete estoy dolida con la dirigencia opositora en 15 “siglos”de espera ahora ponen en bandeja de plata a la pandilla que gobierna nuestra opotunidad de al menos ganarle la Asamblea Nacional. Pareciera que muchos de los lideres opositores tambien haven grandes negocios con el gobierno vendieron su conciencia por un bozal de arepas y que arepas se las comieron todas….Que tristeza