“¡Queremos comida!” “¡Tenemos hambre! Estas son solo algunas frases que resuenan entre la multitud y el hambre”. Según una nota en Efecto Cocuyo. “Los hechos aislados por reclamar alimentos frente a la escasez que atraviesan los comercios se han vuelto cada vez más comunes entre los titulares. Solo en 21 días de mayo, Efecto Cocuyo contabilizó al menos 46 saqueos en diferentes ciudades del país, de acuerdo con los eventos publicados en medios de comunicación regionales y nacionales.”
Llevando agua a este molino, El Nacional hoy en su gran titular nos dice: “Bolsas de comida no resuelven la escasez y la malnutrición. Además los consumidores denuncian que los Clap discriminan políticamente. Para la venta de comida casa por casa, que comenzó hace mes y medio, el gobierno ha designado 18,5 millardos de bolívares. Sin embargo, el programa que coordina el dirigente del PSUV Freddy Bernal no satisface las necesidades de abastecimiento de la población en términos de cantidad y calidad”.
Esto de las bolsas de comida fue una estrategia que impulsó el gobierno siguiendo la iniciativa de García Carneiro, en Vargas, como una manera de paliar la escasez. Pero como bien apunta Elizabeth Fuentes, en Konzapata: “La repartición de comida por los CLAP ni gana votos ni acaba con las colas. La repartición de bolsitas de comida no significa que los beneficiados vayan a cambiar su percepción del desastre que llevan sufriendo por años. A excepción del poeta chavista Iván Padilla Bravo, que compara la estrategia con la que utilizaron los vietnamitas para derrotar al imperialismo yanqui.”
En este desastre de nuestra economía, aparece el Vicepresidente del Área Económica, Miguel Pérez Abad, con unas declaraciones que uno no sabe si calificar de extremadamente ingenuas o extremadamente cínicas. El 2001 lo reseña: “El segundo semestre será “menos peor”. Notitarde, en Valencia: “En el segundo semestre del año bajará la inflación (…) La perspectiva inflacionaria para fin de año estaba ubicada en 900%, pero esa posibilidad se redujo y considera que a partir del segundo semestre se evidenciará un claro descenso en la inflación.”
Pérez Abad, ¿qué significa bajar de 900%? ¿Usted se da cuenta de la barbaridad? Pero allí no termina lo insólito de sus declaraciones. Últimas Noticias: “Se acabaron las empresas de maletín”. Pero no es que combatieron a las empresas de maletín, no es que pusieron presos a los delincuentes que llevaron adelante las empresas de maletín, es que, sencillamente, se acabó todo. No solo acabaron las de maletín, acabaron con todas las empresas. Erradicado, pues, dice triunfante, el desvío de divisas. Y advierte que Polar manipula la producción con fines políticos. No dejó, para estar en buenas con su jefe Maduro, de darle un escardillazo a Polar. Y, para no desentonar con el discurso oficialista, a Pérez Abad también le dio tiempo en el fin de semana de ocuparse de la guerra. En un tuit de El Periódico de Monagas leemos: “Abad supervisa Ejercicio de Acción Integral e Independencia II en Monagas. Y le vemos manipulando con gesto fiero un fusil, al lado de una señora, entrada en kilos, con un gorro supuestamente militar pero más bien parecido a los que usaba Pomponio, que aprieta los labios porque como que se le trancó el fusil. En todo caso allí hay varios combatientes, unos más gordos que otros, unos con uniforme verde oliva otros y con franelita, pero todo esto forma parte de los ejercicios militares del fin de semana.
Ejercicios militares que, según publicó Javier Ignacio Mayorca citando al General Gonzalo García Ordoñez, costaron 20 millones 600 mil dólares. ¡Hay que verle la cara en estos momentos de precariedad a una cifra como esa! Se publicaron fotos, tanto o aun más ridículas que la descrita, donde milicianos, como si fueran muchachitos jugando, a falta de fusiles se tiraban al piso con palos emulando armas. Y entre estos milicianos corrió en la redes la foto de ese individuo Ricardo Sánchez, más delgado, quizá para saltar con más facilidad las talanqueras. Así, pues, se defenderá la patria.
En el tuit de Rocío San Miguel se destaca: “El Comandante Zodi_Monagas52, General de División Elías Antonio Moreno señala como objetivo (de los ejercicios) detectar “actividades contrarrevolucionarias.” Es decir, todo este parapeto es para combatirlo a usted, estimado lector, y a todo aquel que no esté con el gobierno. Aquello de prepararnos para la invasión del imperio, de los marines, etc., era puro cuento. En realidad el objetivo es otro. Y allí es donde viene a tono la mención de la nota que trae hoy El Nacional en primera página: “Generales chavistas ejecutarán el Estado de Excepción en zonas estratégicas. Carlos Alberto Martínez Stapuliones estuvo al frente del cierre de la frontera con Colombia y fue trasladado a la capital. Y según Carlos Guyón Celis, quien fue su tutor en la Academia Militar, “O sigue a Maduro y masacra al pueblo, o ayuda a sacarlo”. “La promoción de Diosdado Cabello está en el poder”, dice el antetítulo.
Para rematar, mientras 18,5 millardos de bolívares se van en las bolsitas de comida y en contraste 20 millones 600 mil dólares se gastan en los ejercicios militares, el señor Maduro no aprende: durante el fin de semana se fue a Jamaica a reforzar el plan de Petrocaribe, con lo cual sigue intacta la regaladera de petróleo.
Creo que, al igual a todos los demás diablos rojos es un reverendo cínico…, pa’ mi, pa’ ti, pa’ mi, pa’ mi, pa’ mi… pa’ ti. Asì se manejan ellos.