El señor Nicolás Maduro anuncia que mañana jueves se dará la tercera reunión entre la MUD y Gobierno. Tercera reunión que, lamentablemente, igual que la anterior será a puertas cerradas, cuando estas reuniones deberían ser todas en cadena nacional. Total, un gobierno que encadena por cualquier mensaje menor, inocuo, sin importancia ni trascendencia debería, transmitir en cadena todas estas reuniones. Pero no, va a ser a puerta cerrada y ese es un elemento no precisamente favorable. Y ahora van hablar de economía, ese es el llamado.
Mientras, en nuestra página de Unión Radio, se hace anuncia la instalación de la Conferencia Económica de Paz: “Nicolás Maduro invitó a todos los actores del sector productivo del país para una reunión en la que se explicarán con mayores detalles los alcances de la nueva ofensiva económica que impulsará el Ejecutivo.”
Noten ustedes lo disparatado de la gestión gubernamental, que para instalar una Conferencia Económica de Paz llaman para explicar la “ofensiva” económica. El término, el calificativo ofensivo no deja espacio para la duda: cuando yo hablo de una ofensiva estoy hablando de algo bélico, no estoy hablando de algo pacifico, y ahí ya tenemos una grave contradicción. O yo convoco para la paz, para reconciliar, para ponernos de acuerdo, o yo les estoy llamando sencillamente para decirles que voy hacer una ofensiva donde ustedes, precisamente, van a ser las victimas porque los voy acorralar. Ahí apunta el gran titular de El Correo del Orinoco: “Maduro anunció para el viernes jornada nacional de inspección de comercios. “Aquel que abuse con la especulación y el acaparamiento lamentablemente le va a ir muy mal”. Porque este Gobierno insiste en que los problemas nunca son de ellos, que lo controlan todo pero jamás son responsables de nada. El responsable siempre es otro que está más allá, el comerciante, el empresario, el especulador, el rico que trata de agredir y maltratar y robar a los pobres, en ese penoso discurso maniqueo que nos han tratado de imponer en los últimos quince años. Pero así va la MUD a su nueva convocatoria, antes ya se reunió con el Foro Penal, para tratar de establecer las condiciones de la Comisión de la Verdad.
El diálogo siempre es necesario, hablando se entiende la gente porque, como bien dijo Capriles en la oportunidad de aquel jueves, “o hablamos o nos acabamos”, y la opción de la violencia solo le favorece al gobierno. Pero es muy difícil dialogar con quien no está dispuesto a dar su brazo a torcer.
Ya ayer comentábamos cómo Rafael Ramírez, en la oportunidad del primer debate, había dicho, con la arrogancia del caso, que el modelo económico era perfecto y estaba funcionando. Merentes, ya lo sabemos, dijo recién exactamente lo contrario, y ya se imaginará uno cómo serán los reclamos a puertas cerradas dentro del gobierno.
En otro orden de ideas, ese mismo día del foro televisado, a Jorge Rodriguez le tocó responderle a Henrique Capriles, y dijo que de ninguna manera iba a permitir la entrada de manifestaciones en su territorio, porque él debe, como dice hoy el diario vea: “Aislar a los violentos”
El criterio de Rodríguez es sencillamente inaceptable. Parte de la base de que una manifestación opositora va a ser violenta, per se. Lamentablemente, en el municipio que dirige el Alcalde Rodríguez están las sedes de los Poderes Públicos: el Palacio de Miraflores, la Vicepresidencia, el Tribunal Supremo de Justicia, el Palacio Legislativo. Sitios del pueblo a donde todo el pueblo debe tener acceso. Y, por una decisión totalmente arbitraria, este Alcalde no deja que lleguen manifestaciones a esos lugares.
Pero los estudiantes han pedido, en un documento muy fuerte que transmitieron ayer vía redes sociales y luego en rueda de prensa, entrar en ese territorio. Reseña hoy El Nacional: “Representantes estudiantiles encabezados por Juan Requensens, invitaron a marchar el viernes por la Libertad de Expresión dentro del Municipio Libertador, para lo cual exigen al Alcalde Jorge Rodríguez garantizar los derechos constitucionales.”
Alcalde Rodríguez, usted está en la obligación de permitir esa manifestación, y lo que es más importante: Alcalde Rodríguez, usted está en la obligación de garantizar la paz y la integridad de todos esos manifestantes.
Porque o hablamos o hablamos.