Las medidas del miedo

   Uno le ve hablando con su gran tamaño, rodeado de militares, todos de ese verde oliva tan cubano, y le ve procurando un discurso con alguna eficacia, con alguna contundencia; trata de amenazar, trata de llevar el discurso a situaciones extremas, pero todo queda como muy hueco, vacío, y, honestamente, da pena ajena.

   En la primera página de El Universal, ayer insistió en que hay una guerra económica para desabastecer al país, para lanzar una inflación descontrolada, para impedir el logro del crédito internacional para el país. Dice Maduro: … va a enfrentar esto con medidas de guerra “si alguno de ustedes cree que va a derrocar a Nicolás Maduro, cuidado sino salen ustedes derrotado. Le hacen daño al país, a la sociedad”.

  Se siente tan inseguro el señor Maduro, que en todo está viendo una agresión hacia él. Puede estar padeciendo esos síntomas de la paranoia donde le teme a cualquiera que se le acerque, le teme a cualquiera que le dirija la palabra. Y, por ello, llega y confiesa abiertamente que teme que lo vayan a derrocar. Ningún presidente, ningún presidente democrático, más aún electo por el voto popular, debería preocuparse en estos tiempos del siglo XXI, de esa situación. Hoy estamos a 14, es decir, apenas ha pasado un mes de la elección y pareciera ya que el señor Maduro está extenuado, agotado, se le han acabado los recursos. Ha tratado de cazar pelea con Lorenzo Mendoza, el presidente de Empresas Polar, y supuestamente hoy “le vera la  cara”, tal como dijo en un desplante bastante desafortunado. Lorenzo Mendoza, sin embargo, se le adelantó ayer . ¿Qué dijo?

  Gran titular de El Universal: “Polar solicita al Estado -es decir, al señor Maduro- que eleve su producción. -Vaya manera de dejarlo en ridículo-. Dice Mendoza: No puede pedírsele a Polar llenar el vacío que ocasionan otras marcas, especialmente las estatales. Y Mendoza, inclusive, va más allá: Harina PAN representa el 48% de la capacidad instalada del país, no podemos acaparar, estamos produciendo a full. O como dice el 2001: “Producimos a toda mecha”. –Hay que ver qué ocurre con las otras plantas, especialmente en manos del Estado. Y entonces le lanza esta oferta-: Queremos comprar o que nos alquilen una planta –refiriéndose a Demaseca en Lara, o a Pronutricos en Portuguesa- y en 12 o 14 meses la ponemos a producir.

  El señor Jorge Arreaza, vicepresidente de la República, dijo -leemos la primera página de el Universal-: Se aprobó un subsidio para los productores azucareros por 769 millones de bolívares (… ) y se decidió que las empresas Pronutrico y Proarepa pasen a manos del Ministerio de Alimentación. Donde está al frente el General Osorio, porque estamos llenos, como ustedes lo saben, de generales, de militares por todas partes.

 Dice el Diario El Mundo: “La economía agobia al nuevo gobierno”. Es como inmenso dragón inderrotable.  Maduro cumple su primer mes en el cargo y enfrenta una crisis crónica de escasez, inflación, devaluación y riesgos de una nueva recesión.

  Diga, Maduro, ¿la guerra económica cómo se manifiesta? ¿Por qué las empresas que están en manos del Estado todas están quebradas? Desde Agropatria ahora, hasta Sidor, por citarle dos emblemáticas. ¿Por qué esta inflación tan descomunal que estamos viviendo? ¿Quién la originó? Señor Maduro, ¿quién fue el que devaluó dos veces la moneda? Eso lleva su nombre y su apellido. Entonces, ¿no será que usted está llenando esa portería de autogoles? Da pena esta situación, de verdad. De allí que tema y diga, ya abiertamente, que lo quieren derrocar.

  Por lo pronto se rodea de militares y, además, les sube el sueldo.

  Leo en El Nacional: Maduro anunció que el aumento salarial para sargentos, tenientes y capitanes será superior al 40%, que el plazo de los créditos para vehículos pasó de 4 a 7 años y que habrá un incremento en la cobertura de salud.

  El miedo tiene muchas maneras de medirse.