El domingo el Ministro de Exterior Jesús Faria informó que, para el día de ayer martes, el presidente de la república haría importantes anuncios económicos. Pues bien, a la espera de esos “importantes anuncios”, en Unión Radio el presidente de Fedecamaras, Francisco Martinez, opinó: “Los empresarios esperamos que la unificación cambiaria sea una de las medidas económicas que el gobierno anuncie”. Pero el presidente no hizo anuncios económicos. Según El Correo del Orinoco, diario oficialista: “Maduro convoca a ensayo nacional del plan de movilización anti golpe”. Repito la frase por si le resultó, como en efecto es, absurda y disparatada: “Maduro convoca a ensayo nacional del plan de movilización anti golpe”. ¿Ensayo? ¿Ensayo nacional? “El presidente Maduro hizo un llamado desde el Campo de Carabobo a todos los movimientos sociales y revolucionarios que integran el Congreso de la Patria a una marcha para tomar Caracas. Indicó que la agenda Carabobo 2017-2018 es una estrategia de contra ofensiva enmarcada en el plan de la patria con el fin de avanzar en la lucha contra la guerra económica y el fortalecimiento de las finanzas del país”. El bla bla bla de costumbre, las palabras huecas que nada dicen.
En El Estimulo.com hacen la siguiente reseña: “Antes de empezar un Congreso de la Patria en el estado Carabobo, llamó a cadena nacional en donde fustigó nuevamente a la oposición al afirmar que la Mesa de la Unidad “se cree imprescindible” y dijo que aquellos a los que les conviene sentarse a dialogar es a la MUD. “Yo sé por qué se los digo. No digo más”.
Aseguró que al presidente de la Asamblea Nacional, Henry Ramos Allup “se le acabó el tiempo como a la leche piche porque le llegó la fecha de vencimiento”, esto en relación a su tiempo en la presidencia de la Asamblea.
Destacó que si existen personas que conspiren contra el país, actuará con todo el peso de la Ley. Y viene la frase del estadista: “Me sabe a casabe el apellido o el nombre del conspirador. Si es un terrorista el que está conspirando, aquí estoy yo y le daré carta blanca a los tribunales para que actúen y defiendan la paz”.
En esta frase destemplada el presidente pone en evidencia, una vez más, que él es quien manda sobre los Tribunales, porque aquí no hay ninguna independencia de poderes. Él por encima de todo, le etat ce moi. Además: “instruyó a los venezolanos afines al oficialismo a “salir a la calle” a defender el país, tomar el poder político “y hacer una revolución más radical”, porque, aseveró, “no hay planes de retroceso ni de rendición”. Evidentemente estaba contagiado del espíritu del Campo de Carabobo. Y remató llamando nuevamente a la oposición a dialogar, aunque puntualizó que “primero es el pueblo” (¡!). Dijo estar preparado para la paz, pero también para “cualquier batalla que haya que dar”. Imposible hablar tanto sin decir absolutamente nada. Cantinflas le envidiaría.
En la reseña de Contrapunto.com: “Maduro se fue sin anuncios: Venezuela esperaba las medidas que prometió Jesús Faría”. Dijo: “No podemos mojarnos”. Y se acabó la transmisión. ¿Qué quiere decir “no podemos mojarnos”? ¿Empezó a llover en el Campo de Carabobo? ¿O se refería a otro tipo de aguas?
Pero no vinieron los anuncios y para el día de hoy se dice que -¡por fin!- Merentes le dará la cara al país y hablará del nuevo cono monetario. Cono que, según lo afirmado por todos los que conocen de la materia, será imposible que esté en la calle el jueves 15 de los corrientes. De manera que el alivio pasajero de esos billetes en nuestras manos no será sino hasta el 2017. La Navidad se irá contando kilos de papeles que nada valen.
En el poco tiempo que oí al Presidente dijo algo sumamente importante: Que terminaría la cadena antes de empezar el beisbol. No sé si lo cumplió.