Circo y violencia

  Ayer, mientras ocurría una bufonada en la Asamblea Nacional, donde los diputados se ponían y quitaban cachuchas, gorras tricolores -aunque la bandera  es la misma, unas gorras, sin embargo, eran distintas de otras-, un diputado se pasó literalmente de una bancada a otra bancada y se quitó la gorra tricolor que tenía aquí y allá le pusieron otra y le aplaudieron; y mientras este individuo, William Ojeda, defendía a Diosdado Cabello, alguien en la oposición le dijo: “jalabolas”. Luego se paró una diputada del oficialismo y dijo: “bueno sí, él es jalabolas, pero es preferible que nos jale bolas a nosotros y no al imperio”. En fin, en medio de un cuadro tan penoso de verdad, tan lamentable, afuera, en las calles, la gente seguía muriendo.

  El titular de hoy del diario El Universal es impresionante. Porque si usted lo lee, así, a la ligera, no va a tener la idea exacta. Fíjese: “En febrero se registran 19 muertos al día en Caracas”, leído a la ligera, insisto, usted dice: ¡caramba, 19 muertos en el mes de febrero y apenas estamos comenzando hoy el día 6! Es como mucho. Porque, además, no estamos hablando del país, estamos hablando sólo de la ciudad de Caracas. Pero no. No. No son 19 muertos en 6 días. ¡Son 19 muertos al día, 19 muertos diarios, sólo en la ciudad de Caracas!!

  Dice El Universal: En lo que va de mes han ingresado 98 cadáveres a la medicatura  forense de Bello Monte. Solo entre lunes y martes entraron a la morgue doce cuerpos, víctimas de la violencia.

  Y luego narran detalladamente los casos. Y hay  un llamado importante: “En zona norte de Sucre contabilizan diez asaltos diarios”.  La zona donde fue asesinado  Alejandro Fermín, -el hijo de Claudio Fermín y Yesmín Royé-, es descrita por vecinos y policías como muy peligrosa, comprende el eje Sebucán, Los Chorros, Boleíta, el Marqués.

  Hay otra nota vinculada con el tema de la delincuencia que nos llama la atención. Viene en la primera página del diario El Nacional: “Acusan al Ministerio de Relaciones de Interiores y Justicia de ignorar las necesidades de Polimiranda”. El comisario Elisio Guzmán, director del cuerpo policial, reconoció las fallas del organismo y el déficit de personal. Sin embargo, señaló que los planes para combatir la inseguridad no han recibido respuesta, ni del antiguo ministro Tareck El Aissami ni del actual Néstor Reverol”.

  Digamos, con relación a esto, que pareciera que al Gobierno no le interesa para nada el tema de la delincuencia. No le interesaba cuando Hugo Chávez era el Presidente y menos le interesa a este Gobierno bicéfalo de Maduro y Cabello. En todo caso, la violencia de ellos es para otro asunto. La violencia que les importa es la generada por ellos en el terreno político contra los opositores. Pero esa violencia del día a día, la de la calle, la que asesina venezolanos, esa la desconocen, no les duele ni les preocupa. Sólo se ocupan de la que puede tener algún tinte, algún rédito político. Ayer, por ejemplo, empezaron hablar de los desaparecidos durante la IV República; “la época más sangrienta “decía Maduro, en claro desconocimiento de lo que ha sido la historia de la violencia política en nuestro país.

  Hoy, sin embargo, el Diario Tal cual afina la puntería y recuerda que, por ejemplo, sólo en el Gobierno de Chávez han desaparecido 132 personas. Y cuando Maduro habla de torturadores, pues recordemos lo que se dijo en este mismo programa en el día de ayer: lo que han hecho con Iván Simonovis es tortura dura y pura; y lo que es peor: pública, abierta, siguiendo instrucciones directas, en el caso de Simonovis, de Hugo Chávez, según la confesión de Aponte Aponte.

  En fin… ahí es donde estamos. ¡19 muertos al día en la ciudad de Caracas, sólo en el mes de febrero! Pero, como diría el todavía Presidente, el show debe continuar.