En 1929, se dio en Sevilla la gran feria internacional, a la cual se le llamó “Exposición Iberoamericana”. Este fue un evento que duró un año: del 9 de mayo de 1929 al 21 de junio de 1930, y se dio para dar muestras del hermanamiento entre España, Hispanoamérica, Estados Unidos, Portugal y Brasil.
Cuba -que todavía les dolía muy hondo a los españoles porque estaba reciente su pérdida en la guerra con Estados Unidos- envió, entre muchas delegaciones, a un grupo musical que haría historia: el Septeto Nacional, de Ignacio Piñeiro.
Ignacio Piñeiro, para muchos el verdadero padre del son, había conformado su septeto con guitarra, bongó, una trompeta y el contrabajo que tocaba el propio Piñeiro.
Allí compuso, en la feria de Sevilla, el famoso son “Suavecito”, de donde vienen los versos: “Una linda sevillana le dijo a su maridito ‘me vuelvo loca, chiquito, por la música cubana’”.
Esta semana vamos a navegar por varias versiones, magníficas todas, del “Suavecito” de Ignacio Piñeiro. Comencemos con la original, de Ignacio Piñeiro con el Septeto Nacional.
Escuche también: “That Old Black Magic”, de Frank Sinatra