En 1973 Ismael Miranda quien en aquellos años componía mucho escribe Pa bravo yo, y se lo entrega nada menos que a Justo Betancourt, quien lo convierte en un clásico.
En 1973 Ismael Miranda quien en aquellos años componía mucho escribe Pa bravo yo, y se lo entrega nada menos que a Justo Betancourt, quien lo convierte en un clásico.