El Quinteto ensaya y ensaya, Domingo Mendoza, en este texto hermosísimo que me hizo llegar con la historia del Contrapunto, narra así uno del os ensayos:
Recuerdo con gratitud el final de un ensayo en el apartamento de la familia Navarro en Los Chaguaramos, sexto piso. Ensayábamos en el recibo, al lado del balcón que daba al patio interior del Conjunto Residencial. El ensayo se había reducido al repaso exhaustivo de los detalles más complicados de las seis canciones que teníamos montadas, pulidas y sedimentadas. Terminó el ensayo, y cuando ya nos retirábamos, iluminó mi mente el nombre del Quinteto –porque ojo, hasta este momento no tenía nombre el Quinteto-, y entonces se ilumina la mente de Mendoza y dice: Contrapunto.
Era un poco más de la medianoche y yo propuse que antes de retirarnos, pasáramos esas canciones de arriba abajo con disposición de ánimo y actitud de concierto, sin comentarios entre una y otra. Aída, dueña de casa, se opuso argumentando delicadeza para con los vecinos, yo insistí pues me parecía que la falta de consideración en tal caso había sido fastidiarlos con pedacitos de canciones repetidas una y otra vez hasta el cansancio desde temprana hora. Entonces, abrimos las ventanas que daban al inmenso patio común y nos dispusimos al concierto imaginario. Era la primera vez que lo haríamos, y lo hicimos, pero cuando sonó el último tilín de la última canción Pájaro Tilín, y como obedeciendo a una señal misteriosa que hubiera dado la entrada, el estruendo de una aplauso rompió el silencio y llenó la noche, al tiempo que se encendían todas las luces de todos los apartamentos. Creo que ese fue el silencio mejor roto del mundo. Un concierto inolvidable de aplausos y luces para el Quinteto, ahora y para siempre, Quinteto Contrapunto.
Inmortales…!
Como dijo Ismael Querales de Un Solo Pueblo “Este es un país de superdotados”
Realmente una bella historia de una no menos bella trayectoria. Nuestro Quinteto Contrapunto por siempre. Orgullo Nacional.
Estas historias y estas grabaciones tocan profundamente mi fibra de venezolano y mi añoranza por mi país
La emoción es incontenible, de un lado, afloran los recuerdos de mi casa, con todos mis hermanos solteros (que alguna vez lo fuímos todos) y la música de Contrapunto llenando los espacios ( uno de mis hermanos aportó a Contrapunto, en ese copioso tejido musical de casa, yo por mi parte aporté a Serrat y así cada uno de los 8 hermanos fuimos sumando preferencias, donde entraron Los Beatles, Sadel, mi mamá con Gardel y Libertad Lamarque, otro hermano Serenata Guayanesa, Alí Primera, en fin toda la buena música que es mi fabulosa herencia sonora y por otra parte, la actualidad del país, que nos quiebra el corazón…Tanta saudade y tanta vera veritá…
Dios¡ es imposible leer ésto, y que no se le afloje a una el corazón. Vivos recuerdos de una Venezuela musical….