En 1971 falleció en el exilio en Nueva York, el gran Arsenio Rodríguez. Ese mismo año Larry Harlow dedica un disco completo a su música, abría fuegos con esta composición de él y de Ismael Miranda. Era la manera de rendirse plenamente ante el más influyente de todos los soneros modernos.
Con este disco Arsenio del año 1971, Harlow le rendiría tributo a todo el viejo son cubano. Lo hacía desde la ciudad de Nueva York inspirándose en este gran son del antiguo bajista de Arsenio, Lazaro Prieto.
I prefer the “original” version by Arsenio Rodriguez…. more soulful.