El orgasmo más famoso en la historia del cine, es un orgasmo falso. Claro, usted me dirá, todos los orgasmos en el cine son falsos, a menos que se trate, digamos, de una película porno, en cuyo caso, mas falsos aún. Pero cuando digo el orgasmo más famoso es falso, es porque, descaradamente, la escena estaba planteada para que la mujer fingiera un orgasmo. El orgasmo lo finge en una cafetería. Lo finge delante de todo el mundo. Ellos vienen desde Chicago y van hasta Nueva York. No se la llevan nada bien. Todo el trayecto ha sido discutiendo. No se conocían, prácticamente están compartiendo el trayecto, dándose la cola, como diríamos acá en Venezuela. Él se ufana y dice, yo perfectamente puedo reconocer cuando una mujer esta fingiendo, si la sé satisfacer en una cama. Y ella dijo, ¿seguro? y empezó a fingir el orgasmo.
La escena es tan extraordinaria, tan hilarante, que ya esa escena para muchos vale la película, y evidentemente estamos hablando de una película magnifica, maravillosa, “When Harry Met Sally…”. Ella, Meg Ryan, fingió de tal manera el orgasmo, que para muchos es quizás de sus mejores escenas, en toda su larga y muy exitosa carrera. La escena finaliza con un bocadillo magnifico. Se acerca la camarera y le pregunta a una señora, ya de cierta edad, ¿y usted que va a tomar?, y ella dice: lo mismo que tomo ella, señalando a Meg Ryan, que había dejado pues, absolutamente pálido y sin palabras a Billy Crystal, quien hacia el papel de Harry.
¿Por qué estamos recordando esta película en la mañana de hoy? Pues porque, esta película de 1989, dirigida por Rob Reiner, un director norteamericanocon mucho talento, estaba inspirada, se hizo con base en un guión muy inteligente, agudo, de Nora Ephron.
Nora Ephron, es nuestro personaje para conversar hoy, porque recién ha fallecido, víctima de una leucemia en un hospital de Nueva York, a la edad de 71 años. Esto ocurrió el martes 26 del mes de junio.
Nora Ephron, es como decíamos, una mujer con mucho talento para escribir para el cine, y luego del sobrado éxito de “When Harry Met Sally…”, inclusive empezó a trabajar ella con sus propias historias y a dirigirlas. Es así como viene “Sleepless in Seattle”, es como luego viene el remake de una vieja película de los años 30, finales de los 30, “You’ve Got Mail”, en esta oportunidad pues, lejos de ser el cartero, el que iba a la casa, era la computadora que anunciaba que venía el correo. Aquí seguía Meg Ryan, en todas estas películas, pero el galán dejó de ser Crystal, para pasar a ser Tom Hanks.
Citamos estas películas emblemáticas de la señora Ephron, porque ella tuvo un talento único para manejar ese género que ha sido tan característico de Hollywood, la llamada “comedia romántica”. La comedia romántica va siempre sobre una cuerda floja. Coquetea con la historia de amor que le da sustento, que le da aliento. Coquetea con la comedia que la justifica, sin pasar a ser una película cómica y sin ser el drama romántico, porque las historias de amor, por lo general, en el cine, en la literatura, en el teatro, son historias trágicas, dramáticas. La comedia romántica pasa a ser lo contrario. Pero es muy fácil estrellarse con la llamada comedia romántica.
Creo, tratando de inventar alguna estadística, que por cada comedia romántica acertada, deben fracasar 20 o 25 en el intento. Hay que tener talento para el humor, para la liviandad y sobre todo para poder cautivar con el romance ese de la pareja. Muchas telenovelas, a veces, han tratado de seguir ese camino y creo que son la mayoría las que no han llegado por ese camino, porque se les hace realmente escabroso.
La señora Ephron, como pocos, llegó a manejar este género, que ciertamente tuvo mucho apogeo en cine de los 40 y 50, y algunos intentos ya, pero menos afortunados, en las décadas pasadas.
La señora Ephron nos ha dejado luego de su última película “Julie & Julia”, inspirada en la vida real de la chef Julia Child, y allí ella vuelve a trabajar con una de sus actrices favoritas como lo fue Meryl Streep.
Recordemos en esta pequeña nota a Nora Ephron, y los empedernidos, los románticos de siempre, pueden volver sobre cualquiera de estas comedias, en particular “When Harry Met Sally…”. Y el orgasmo de Ryan sigue siendo el mejor, no importa que sea falso.
Disculpa, la escena del orgasmo ocurre cuando se vuelven a encontrar y ya estan saliendo como amigos en la epoca actual, en la película (1989)