El papel va a desaparecer. Los libros una vez más condenados a muerte van a desaparecer, con ellos, pues, desaparecerían también las revistas y los periódicos. Mucho se ha hablado de cómo la lectura digital va arrasar con todo lo demás. Las importantes y emblemáticas revistas Times y NewsWeek van al mundo digital prescindiendo del papel que las caracterizó durante tantos años. Si esto es así, ¿cómo es que un hombre que viene de ese mundo digital, cómo es que el padre, por ejemplo, del Kindle, que fue el primer instrumento para leer libros en una tableta, se va de lleno y se zambulle en el papel?
Veamos. Jeff Bezos, el creador de Amazon ha comprado el Washington Post. Leo esta nota que publica la BBC:
Jeff Bezos, cofundador de Amazon, se convirtió en el más influyente y poderoso ejecutivo del mundo de la tecnología tras la muerte de Steve Jobs.
En efecto, el estadounidense de 49 años ocupa el puesto número 19 en la lista de los hombres más ricos del mundo, según la revista Forbes. Bezos tiene una fortuna personal valorada en US$25.000 millones. Y ahora decidió gastar alrededor del 1% de ese dinero, US$250 millones, en comprar el tambaleante Washington Post, uno de los dos “históricos” de la prensa tradicional estadounidense, junto al New York Times.
Todos se preguntan por qué lo hizo. Las respuestas son varias y difíciles de calificar, sobre todo si se tiene en cuenta que Bezos dijo en una entrevista al diario alemán Berliner-Zeitung en noviembre de 2012 que en 20 años no habría más diarios impresos.
Hay quienes señalan que al tener un diario de tal calibre gana capacidad de influir en las esferas políticas. El negocio de los diarios se ha venido a menos (muchos han perdido hasta diez veces su valor en la última década) y varios multimillonarios ya han invertido en ellos.
John Henry, dueño del equipo de Grandes Ligas Medias Rojas de Boston, compró el Boston Globe, que pertenecía al New York Times. Warren Buffett ya lleva dos años comprando diarios locales.
Muchos creen que Bezos podrá utilizar sus conocimientos y experiencia en los negocios digitales para volver redituable la operación en línea del Washington Post.
También se especula con posibles formas de integrar el negocio de noticias con el de los lectores de libros digitales.
En octubre de 2012 le dijo a la BBC que le encanta inventar. “Nos encanta emprender, hasta nos encanta entrar en callejones sin salida”.
Pero por ahora nadie sabe a ciencia cierta qué hará Bezos con el diario.
Bezos nació en Albuquerque, Nuevo México, en 1964. Tras graduarse en ciencias informáticas e ingeniería eléctrica en 1986 en la Universidad de Princeton, Bezos (el apellido es el de su padre adoptivo, el cubano Miguel Bezos, segundo marido de su madre) trabajó un tiempo en finanzas en Wall Street.
Pero en 1994 dejó Nueva York y se trasladó a Seattle, donde con un préstamo de US$300.000 que obtuvo de sus padres, fundó Amazon.
La empresa comenzó como una librería en línea en el garaje de Bezos hasta convertirse en uno de los grandes de internet. Vendió su primer libro en julio de 1995. –Apenas 18 años atrás-.
Con el lector Kindle, Amazon desestabilizó el mercado de las librerías y redefinió la forma de leer libros. Con el tiempo Amazon expandió sus operaciones a muchos otros bienes (CDs, videos). Más adelante incursionó en el terreno del empleo temporal, proveyendo una plataforma, Mechanical Turk, para poner en contacto a pequeños proveedores con clientes en busca de fuerza de trabajo intelectual humana a bajo costo.
Y en 2012-el año pasado– Amazon obtuvo ganancias por US$61.100 millones (27,1% más que en 2011 y unas 100 veces más que en 1998). Sin embargo, la empresa registró pérdidas de US$7 millones en el segundo trimestre de 2013.
Pero en medio de esto Bezos decide arriesgarse con el Washington Post y ya veremos que ocurre.