En la película el Titanic, entre las tantas versiones cinematográficas que se han hecho, hablamos de la más reciente, la del canadiense James Cameron, se nota cuando los músicos no tienen más remedio, ya no quedan botes salvavidas para ellos y lo único es seguir tocando la música.
En aquellos años, a partir de aquel mes de abril del año 1912’, los pocos sobrevivientes al naufragio del Titanic lo comentaban “lo increíble es que la música no dejó de sonar”.
Es el detalle que más se ha subrayado a lo largo del tiempo. Lo curioso es que ese violín que no dejó de sonar acaba de ser adjudicado en una subasta en Europa, nada menos que por un millón de euros. La nota de la agencia Reuters dice así:
El violín que sonó durante el hundimiento del Titanic alcanzó hoy la cifra récord de 900 mil libras (alrededor de un millón de euros; 1,3 millones de dólares) en una subasta celebrada en la casa de pujas Henry Aldridge & Son, en Wiltshire (suroeste de Inglaterra), especializada en objetos de coleccionista.
Se trata del instrumento que Wallace Hartley, el director de la orquesta que amenizaba en el malogrado barco tras chocar con un iceberg, no dejó de tocar parar tratar a tranquilizar a los aterrados pasajeros.
La casa de subastas británica superó hoy sus expectativas pues había estimado que el precio del violín rondaría los 354mil 400 euros (479 mil 200 dólares).
Es además un precio récord mundial para un artículo subastado de las piezas rescatadas del hundimiento de ese barco.
El especialista en piezas del Titanic Alan Aldridge consideró que el preciado violín es “la pieza más rara e icónica” de todos los objetos del Titanic.
Wallace Hartley, el dueño del instrumento, falleció junto con otros 1.517 pasajeros cuando el barco se hundió en 1912.
El violín fue encontrado dentro de un estuche y atado a su propietario diez días después de la tragedia.
La orquesta del Titanic interpretó el Nearer, My God, To Thee , “Más cerca de ti mi Señor” en un intento por calmar a los pasajeros al tiempo que estos intentaban meterse el botes salvavidas.
En la parte posterior del violín, se ve una inscripción en la que se desvela que se trató de un regalo a Hartley de quien fuera su prometida, Maria Robinson, en 1910, la dedicatoria decía: “Para Wally, por nuestro compromiso”.
El compromiso por lo visto no se pudo cumplir, pero el violín no dejó de sonar.
que historia tan hermosa e inspiradora, gracias César
Les cuento que hace como veinte años trabaje como maestro rural en una zona muy apartada del estado Lara,,,en Maraca El Tocuyo,,cuando un señor me comento a cerca de un violín muy antiguo,,,,nos fuimos al encuentro con el instrumento era una de las posiciones de una señora q le había dejado su difunto esposo,,,,y me comento que en tiempos de la segunda guerra mundial llego a aquellas tierras un hombre de origen italiano quien había sido un consagrado músico y q al escapar de la guerra se había llevado consigo aquel tesoro,,,,,,se había hecho una gran amistad con el cuidador del presido instrumento a quien lo había dejado a cambio de pasajes para regresar a Italia luego de terminada la guerra,,,,,,pero el viajero nunca volvió a reclamar tal posecion,,,,,,,así pasaron los años…fue subastado en cristi ,NY..