COMUNICADO
El grupo integrante de diversos sectores de la sociedad venezolana que hemos venido
a darle soporte técnico al proceso de negociación en la República Dominicana informa:
Desde el primer encuentro del 1 y 2 diciembre, las penurias que estamos padeciendo
los venezolanos se han multiplicado y agravado frente a la irresponsable indolencia de
un gobierno cuyo único foco de atención es la permanencia en el poder, aunque sea
sobre las ruinas del país.
Es tan dramática la situación, la desesperación por sobrevivir y por buscar lo más
elemental, alimentos y medicinas, que nos hemos convertido en una nación de
emigrantes, como lo muestra el doloroso caso de nuestros muchachos que ayer mismo
fallecieron en una balsa improvisada huyendo de la miseria y del hambre, tratando tal
vez de buscar la manera de ayudar a sus familias.
Esto nos parte el alma como venezolanos y es un ejemplo más del drama humanitario,
que se repite a diario en todas las ciudades del país con las protestas por alimentos y
medicinas que el gobierno controla políticamente y que nos han dejado los presos del
hambre, nuevas víctimas de la represión del Estado, ahora concentrada en castigar la
miseria. Hay medidas prácticas, mediante la cooperación internacional, que el gobierno
sabe que se pueden tomar de inmediato para aliviar la emergencia humanitaria
compleja que padece Venezuela, y la oportunidad de este nuevo encuentro sirve para
reiterar nuestra exigencia al gobierno para que asuma su responsabilidad.
Si bien es cierto que, en el mes de diciembre de 2017, el gobierno en el marco de la
negociación otorgó medidas cautelares sustitutivas de libertad a 53 presos políticos,
aún continúan en los calabozos 325 presos, que no son exclusivamente políticos, sino
miembros de la sociedad civil, como lo son estudiantes, amas de casa, profesionales y
los nuevos presos del hambre, también policías y militares que se han opuesto a las
políticas represivas del gobierno, por lo cual mantenemos la exigencia de la inmediata
liberación, y el cese de las detenciones arbitrarias y las persecuciones.
Sobre este mar de dolor humano, se acelera la destrucción del aparato productivo, se
fomenta la anarquía, se persigue a los comerciantes y trabajadores, y el gobierno
amplía sus poderes económicos, para seguir obteniendo los perversos resultados con
los que pretende doblegar a la sociedad: solo en el mes de diciembre la hiperinflación
alcanza el 85% y el año cierra con el triste récord mundial de 2.616%
Frente a la catástrofe que padecemos, consideramos que todos los espacios de lucha,
todas las vías de presión para que esta situación cambie son necesarios: espacios
políticos, espacios de la sociedad civil, la calle, la presión internacional, la lucha desde
las instituciones, la negociación, todos son instrumentos para el cambio y todos suman.
La suma de los esfuerzos políticos y de la sociedad civil, es decir, la unidad de todos
los venezolanos, es la fortaleza que tenemos.
Estamos hoy apoyando esta instancia, conscientes de la naturaleza del interlocutor que
está enfrente. Convencidos de que nuestro deber ciudadano es contribuir a las
soluciones que tanto necesita nuestro país, acompañamos este proceso de buena fe y
con realismo. La reconstrucción del país solo comenzará con un cambio de gobierno,
un cambio con elecciones limpias, con garantías internacionales, y con ese objetivo nos
mantenemos activos en este proceso.
Asdrúbal Oliveros, Alonso Medina Roa, Ana Leonor Acosta, Maria Eugenia Mosquera,
Marcela Máspero, Jorge Roig, Juan Manuel Raffalli, Colette Capriles.
Caracas, 11 de enero de 2018