El Presidente Nicolás Maduro en dos alocuciones de radio y televisión me ha señalado como financista y partícipe de hechos violentos. Ambos señalamientos son totalmente falsos. El testimonio presentado por el Presidente mediante un vídeo carece de toda validez pues fue obtenido mediante la tortura a Alejandro Sánchez y por tanto fue descartado por la Fiscalía como prueba en el juicio que se le sigue a este ciudadano. No hay ni una sola evidencia que pueda inculparme de actividades ilegales.
José Guerra ganó las elecciones de Diputado en el circuito N° 4 de Caracas que comprende las parroquias del Valle, Coche y Santa Rosalía, derrotando el ventajismo y la maquinaria propagandística del PSUV y, la política clientelar de ese partido de regalar artefactos eléctricos y comida durante el proceso electoral. Fue una victoria contundente por casi 10 puntos de ventaja.
En mi desempeño como diputado y actualmente presidente de la Comisión Permanente de Finanzas y Desarrollo Económico de la AN, siempre he actuado apegado a la Constitución, basado en el artículo 197 que establece que los diputados deben tener permanente contacto con sus electores. Esta relación sostenida con los electores ha permitido conocer a fondo las necesidades de un pueblo que hoy pasa hambre y sufre las consecuencias de la crisis económica.
Igualmente desde la Comisión de Finanzas de la Asamblea Nacional he sostenido una línea clara sobre los asuntos económicos y financieros del país, en particular acerca del endeudamiento público para que Venezuela no repita en estos años la trágica experiencia de lo que ocurrió en los años setenta y ochenta cuando el país fue endeudado masiva e irresponsablemente.
Por estas razones, con base en el artículo 312 de la Constitución que norma que todo endeudamiento público debe ser aprobado por la Asamblea Nacional, esta institución adoptó el criterio de declarar nula cualquier emisión de deuda que no haya sido autorizada por el parlamento venezolano. En lo referente a los contratos de interés nacional en materia petrolera la Ley Orgánica de Hidrocarburos es taxativa al establecer que cualquier modificación en la composición accionaria de los contratos de la Faja Petrolífera del Orinoco, u otra actividad en el campo petrolero, debe igualmente ser aprobada por la Asamblea Nacional, de manera tal que si el gobierno está interesado en obtener financiamiento por esta vía de la modificación de los términos de los contratos petroleros debe concurrir a la Asamblea Nacional para su aprobación.
En lo referido al endeudamiento público mi posición ha sido firme y definida: tal como está contratada la deuda externa tanto del gobierno como de PDVSA no es posible pagarla sin causarle un enorme daño al pueblo venezolano, por cuanto ello implicaría seguir restringiendo las importaciones de bienes esenciales, hecho este en el cual viene incurriendo el gobierno. Esta deuda está agobiando las finanzas publicas debido en primer lugar a la disminución de los precios del petróleo y de los volúmenes de hidrocarburos exportados y, en segundo lugar por la concentración de los vencimientos de esa deuda entre los años 2017 y 2022 que suma un total aproximado de 54 mil millones de dólares. Por tanto, la mejor opción para Venezuela consiste en iniciar de inmediato un proceso de refinanciamiento de esa deuda con el objeto de alargar los plazos y mejorar otras condiciones de pago.
También he alertado al país acerca de un esquema cambiario disfuncional que incentiva la corrupción y que propicia déficits recurrentes en la gestión financiera de PDVSA, que terminan siendo financiados por el BCV mediante la impresión de dinero inorgánico y la consecuente depreciación del bolívar y una inflación que está devorando el salario de los trabajadores venezolanos.
De esto se trata mi actuación como Diputado y lo seguiré haciendo así para que el país reencuentre el rumbo del crecimiento económico con baja inflación y mejora en las condiciones de vida de nuestro pueblo. Conspirador no soy yo sino aquellos que entre 2005 y 2010, en medio de un auge petrolero sin precedentes, propiciaron un endeudamiento que hoy no podemos pagar. Yo estoy proponiendo soluciones.
He sido y seré un defensor de la vía electoral y constitucional como mecanismo para la resolución de los conflictos y la crisis política que hoy agobia a Venezuela, no creo en atajos y menos en golpes de estado de cualquier naturaleza, tanto en los golpes con bayonetas como los golpes con barniz judicial como el que ha dado la Sala Constitucional del Tribunal Supremo de Justicia en sus consecutivas sentencias que rompieron el hilo constitucional, hecho este reconocido por la Fiscal General de la Republica Luisa Ortega Díaz. Por ello, el Consejo Nacional Electoral debe proceder de inmediato a convocar las elecciones ya vencidas para Gobernadores y de Alcaldes de acuerdo a un cronograma electoral claramente determinado.
Jamás auspiciaré la conformación de grupos armados al margen de la Ley como sí lo hace el Gobierno. En los distintos sectores y barrios de la ciudad de Caracas lo que hemos hecho en particular en Santa Rosalía, el Valle y Coche es acción social consistente en incentivar la práctica del deporte, la cultura y realizar en oportunidades sancochos comunitarios para que el necesitado pueda acceder a la comida ahora escasa y cara.