Pánico y desespero

 

  Hay ciudadanos muy preocupados por la situación política que suelen manifestarse, por ejemplo, por el twitter reclamando que el país no sale a la calle a protestar. Uno no entiende muy bien a qué se refieren estos ciudadanos, o será que a lo mejor pasan mucho tiempo detrás del twitter, en la computadora o en el móvil. Pero la calle está llena de protestas.

  Hoy, por ejemplo, El Universal nos dice: “Las protestas rebasan las calles”, y son protestas de todo tipo. En el Tribunal Supremo de Justicia se concentraron las protestas de militares que participaron en las asonadas de 1992. Estos son los militares, la tropa, que dicen “hubo beneficios para los oficiales”, es decir, para los Diosdado Cabello, los Rafael Isea, los Jesse Chacón, “pero a nosotros los que pusimos el pellejo para nosotros no hay nada”.

  Los empleados de Corpoelec y los jubilados de la CANTV también protestaron. En el Zulia los empleados  cesanteados de la gobernación demandaron que se cumpla una medida de reenganche. En Delta Amacuro los bomberos iniciaron una huelga de hambre para exigir el pago de reivindicaciones laborales. En Barinas, estudiantes protestaron por la falta de pupitres.  Trabajadores de diversos sectores realizaron concentraciones, marchas y protestas ayer tanto en la capital como en el interior. En Caracas hubo tres protestas con cierre de vías, otra en Los Teques, una más en Higuerote. En fin… El país entero protestando. El país entero incómodo, molesto, harto, furioso, rabioso con la situación que se vive. Ante esto, la imagen del señor Maduro, pues, se ve cada día más resentida, más cuestionada, más criticada.

  Hablando de la imagen del señor Maduro, en el Nuevo País leo: “La imagen de Maduro perjudica a los candidatos del Gobierno el 8 de diciembre”.  Según la encuesta más reciente de Consultores 21, reseñada en este diario: la oposición ganaría con comodidad en la gran Caracas, amplia ventaja de Ledezma sobre Ernesto Villegas. Ya habíamos visto, según Datanalisis, cómo es abrumadora la ventaja de Ocariz sobre el Potro Álvarez en Petare, por citar solo un caso. Y algo que tendría un peso simbólico y político muy importante: la eventual derrota de Jorge Rodríguez en Libertador ante Ismael García.

  Por ello -entiende uno-, Maduro apela a lo que no deja de ser  abiertamente una trampa: decretar oficialmente -es decir, con publicación en Gaceta Oficial y demás- que el 8 de Diciembre, el día electoral, será el Día de la Lealtad y el Amor a Chávez. ¿Qué significa esto? Como bien lo apunta Pedro Pablo Peñaloza, en El Universal: “EL 8 de Diciembre cuando ya estará prohibida la campaña electoral los chavistas deberán realizar actos y eventos que exalten la defensa permanente del legado de Chávez”.

  Es una trampa abierta, descarada, inaceptable, porque cuando todo debería estar concentrado en el evento electoral, el chavismo apelará a lo que sigue siendo su mejor imagen, el recuerdo de Hugo Chávez, porque la presencia de Maduro, su imagen, no da; más bien resulta perjudicial y mientras más pajaritos ve parece que es peor.

  En ese contexto viene entonces esta trampa que el rector del CNE Vicente Díaz califica de: “Grosero ventajismo electoral del gobierno”, según lo leo en el gran titular de Notitarde.

  Esta es una muestra evidente de desespero, de susto, de pánico. Pero, como decía en el viejo refrán infantil, “la tramposería sale”.

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2 comments

  1. Cesar Miguel, muy bueno tus editoriales, desde Mexico este humilde venezolano te manda saludos y te sigue a diario, Al final veremos luz al final del Tunel y salir de esta pesadilla que vive nuestra Venezuela.

  2. Y ese día la ley prohíbe toda manifestación política… Sería otra flagrante violación a la constitución y a la ley… Lástima que ya algunos están acostumbrados a esto y muestran indiferencia.

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