Trampas

  El Universal destaca hoy como su segunda noticia más importante: “La Sala Constitucional resolverá las 7 impugnaciones sobre el 14 de abril”. La ponencia conjunta de magistrados advierte que conocerán cualquier otra causa sobre las presidenciales pasadas.

  El Nacional acota que: “Henrique Capriles aplaudió esta decisión”. Los siete recursos que fueron interpuestos por la oposición ante la Sala Electoral serán remitidos a la nueva jurisdicción del Tribunal Supremos de Justicia, en el lapso de cinco días hábiles contados desde la notificación, –es decir desde el día de ayer-. Hoy vencía el plazo para sentenciar si había razones electorales para anular los comicios presidenciales del 14 de abril pasado.

  Esto es con relación al proceso de las impugnaciones presentadas tanto por Henrique Capriles como por la MUD ante el Tribunal Supremo de Justicia. A lo largo de esta semana hemos venido leyendo los reportes muy minuciosos, desmenuzados, que ha venido publicado El Nacional a propósito del informe del Instituto de Altos Estudios Europeos, advirtiendo todas las TRAMPAS -en grandes mayúsculas, porque no hay otra palabra para definirlo- que se llevaron a cabo por parte del Consejo Nacional Electoral y del Ejecutivo Nacional, en el pasado proceso electoral del 14 de abril.

  Doloroso Informe, es el título del editorial de hoy del diario El Nacional a propósito de esto. Leo algunos párrafos:

  La misión del Instituto de Altos Estudios Europeos que participó como acompañante (invitada especialmente por el CNE y por el Alto Gobierno, y no por la oposición) durante las recientes elecciones en Venezuela, presentó un informe impecable que resume con amplia transparencia, honesto equilibrio y total precisión lo que la mayoría de los venezolanos pudimos percibir durante el proceso electoral que llevó a Maduro a la presidencia mediante innumerables abusos, ventajismo descarado y uso apabullante de los medios públicos.

  Este informe confidencial y que ahora se hace público gracias a la prensa, adquiere política e históricamente un carácter de prueba irrefutable en el ámbito nacional e internacional porque quienes lo redactan son invitados especiales del Gobierno y de la inefable señora Lucena, y por elemental cortesía estos observadores no pueden ser desmentidos ni insultados sin caer en el ridículo más grande. (…) Desnudan los observadores la triste tragedia que hemos vivido en los meses posteriores a la desaparición de Chávez, y el cúmulo de triquiñuelas institucionales a que fue sometido el país para garantizar la continuidad del régimen chavista con Maduro a la cabeza.

  Es vergonzante que mientras los propios venezolanos estamos incapacitados para obligar a que nuestras autoridades electorales y el TSJ se comporten con honorabilidad y ajustados a nuestros preceptos constitucionales, tengan que venir acuciosos observadores de otras latitudes para desenmascarar ante la opinión pública nacional e internacional la serie de violaciones a la normativa electoral cometidas por el Gobierno y el CNE. (…) Con toda razón denuncia el IAEE la actuación del CNE, que al negarse a hacer una auditoría completa demuestra la poca transparencia de su actuación como garante de un proceso de tamaña importancia.

  Este informe deja a la luz pública toda la oscura, terrible, inaceptable, viciada y tramposa actuación de estos organismos y de estos personeros. Hay un detalle importante, ellos dicen que los europeos vinieron bajo un acuerdo de confidencialidad con su anfitrión, el CNE. Pero dado el abuso del Gobierno, del CNE y del mismo TSJ, luego del 14 de abril, se vieron obligados a romper con ese acuerdo de confidencialidad.

  Se indignaron los europeos, ojala también nos indignáramos suficientemente los venezolanos.