La multitud desbordó las calles de Caracas. Y para muchos de los que caminaron esas calles fue una multitud, inclusive, mucho más impresionante que la que salió a las calles cuando la campaña electoral del año pasado. Una multitud eufórica, alegre, que iba a escuchar las palabras del candidato presidencial.
Capriles, ayer, dio el discurso de un hombre que se siente bastante seguro de donde está; manejó con mucha habilidad la ironía y el humor para descalificar a su contrario. Por ejemplo, Maduro de un supuesto plan de magnicidio que lo estaría llevando adelante Armando Briquet, por instrucciones directas de Capriles. ¿Cuál fue la respuesta de Capriles a esta nueva? Le dijo: “¡Caramba! antes era a mí a quien iban a matar, ahora es a ti al que van a matar. –Y la respuesta fue muy sencilla: Maduro no seas ridículo chico”.
Una ocurrencia como la de Maduro, sencillamente, no se la va a tomar en serio. Se mofó también de cómo un Presidente de la República, alguien que aspira ser electo Presidente, no conozca ni siquiera al país. Porque Maduro, entre sus grandes fallas y errores, ha hablado del Estado Margarita, o del Estado Cumaná, o del Estado La Guaira, o del Estado San Fernando; y se tomó Capriles la molestia de decirle: “Es San Fernando de Apure, capital del estado Apure; es Cumaná, capital del estado Sucre; es Margarita, que forma parte del Estado Nueva Esparta; La Guaira forma parte del Estado Vargas”. En fin…
Pero más allá de estos detalles, lo más importante, quizá, fue cuando confesó: “Hoy les quiero decir con seriedad que estamos ganando este proceso”. Capriles ha sido muy cuidadoso en todo momento, en esta campaña electoral, y cuando ayer ya se empezaban a oír las voces de expertos analistas diciendo que se habían cruzado las líneas, pues, ayer ya Capriles lo ratificó ante la multitud.
Además, algo importante: “Yo sé reconocer mis derrotas”. De manera que no tiene sentido el desplante de Maduro, citado hoy en el Correo del Orinoco: “Al candidato de la burguesía, que diga si él va a respetar los resultados de la voluntad del pueblo el próximo domingo, ahí le dejo eso”. Desplante innecesario porque en el pasado 7 de octubre, inclusive criticado por muchos de sus seguidores, Capriles reconoció, cuando vio una ventaja ya sólida en su contra: “Sí, perdí las elecciones” –y agregó-: “las perdí yo a título personal, no las perdieron quienes estuvieron apoyándome”. Pero ahora que se siente mucho más seguro Capriles suelta esta frase: “No se equivoquen voy a defender cada voto de los venezolanos”.
Fue para la Unidad un acto sumamente importante el de ayer y la campaña continúa. Veremos qué ocurre en estos escasísimos días que nos separan ya del próximo 14 de abril.
Por lo pronto, en lo que a Caracas respecta, la suerte está echada.
se ve y se siente venezuela ya escogio un nuevo presidente